RELATO TRAVESTI: Travesti en Camp Nou Barcelona, La Sagrada Familia, Casa Batllo, Pedrera etc quedarán para otra vez.
Autor: Omar
MI PRIMERA VEZ
Antecedentes: Hola gente!!, Aquí os voy a contar mi humilde relato sobre lo que sucedió mi primera vez. Soy un chico de 34 años que trabaja en un pueblecito no muy grande de Asturias, por lo que podéis imaginar lo complicado que lo tengo para satisfacer mis necesidades con chicas de esta condición. Bien, hace unos meses, en el centro donde trabajo, surgió la posibilidad de realizar un viaje a Barcelona, salida un Jueves regreso un Sábado por la mañana, y como os podréis imaginar me apunté al carro bajo la disculpa de que no conocía Barcelona y me inundaba la curiosidad por poder conocerla.
Jueves enBarcelona: Tras un agotador día por Barcelona, por motivos de trabajo, llegamos al hotel y llegaba el momento de desconexión, descanso, la gente del grupo estaba muy cansada, no era muy tarde las 8 más o menos, horario europeo, unos decidieron quedarse en el hall del hotel otros en sus habitaciones, pero había uno que lo tenía muy muy claro, ya os lo imagináis, si yo, llevaba mucho tiempo esperando esta ocasión como para desperdiciarla, y con las ganas que tenía de conocer Barcelona, todo lo tenía bien planeado, línea de metro, parada de Camp Nou je je. Sin muchas explicacaciones les comenté a mis compañeros que iba a dar una vuelta por Barcelona pues me apetecía aprovechar ya que para una vez que estaba allí, je je; afortunadamente nadie se apuntó, ya procuré yo también no insistir mucho. En unos minutos estaba allí, delante del Camp Nou, joer ¡!! me importaba un pepino el estadio, yo iba a lo que iba, que nervios, dónde estaba esa famosa calle, paradigma del travestismo, como iba con tiempo rápidamente la localicé, era temprano, poco más de las nueve, y si allí empecé a ver chicas, joe era la primera vez que veía travestis tan de cerca, calle arriba y calle abajo, iba caminando despacio sin quitar ojo en las chicas que allí había, todavía no había muchas pues no era muy tarde, calle arriba calle abajo, ellas más pendientes de los coches que de los peatones de la acera como yo, morenas, rubias, altas, no muy altas, buenos tipos, con mucho pecho, normal, muy femeninas, menos femeninas, etc; qué os voy a contar amigos, yo estaba ensimismado, embelesado, viendo aquel espectáculo, calle arriba calle abajo, unas se acercaban, me insinuaban algo, otras iban y venían., se montaban en sus coches, y a la media hora otra vez allí, alguna ya me conocía de tanta calle arriba calle abajo, y ya se reía y me comentaba que antes o temprano iba a caer con alguna, que razón tuvo.
Fue pasando el tiempo, media hora , 1 hora, y cada vez más chicas, como todavía me quedaba una noche, ese día no me atreví a irme con ninguna, no sé los nervios tal vez, pero si tenía claro que si lo hacía, había un para de chicas que me habían llamado mucho la atención, especialmente una rubia, muy sexy, sensual , su voz me ponía a 100, y le prometí que mañana vendría a por ella, era un encanto y sólo de pensarlo me entraba una extraña mezcla de sentimientos entre, nervios, excitación, ansiedad, vosotros me entendéis. Estaban a punto de cerrar el metro y me tuve que ir, pero tenía claro que volvería el día siguiente.
Viernes en Barcelona: Era mi último día ya y sabía que era mi última oportunidad, y como iba a desaprovechar esta oportunidad, pues si amigos, allí estaba otra vez, metro, parada ..... y Camp-Nou, pero esta vez decidido a estrenarme, como estaba un poco nervioso, me tomé unas cuántas cervezas antes, allí estaba yo calle arriba calle abajo, había más chicas, claro era viernes noche y un poco más tarde que el día anterior, tenía claro con quién iba a negociar, allí la vi, me iba a acercar y observé que un coche la recogía, no pasa nada me dije, volverá en media hora más o menos, yo seguí calle arriba calle abajo, se me acercaban, yo que iba un poco mareado pero no borracho, alucinaba, y estaba como loco por concretar algo inmediato, se pasó la media hora y ella no volvía por lo que decidí ir al plan B, que como siempre nadie lo tiene, este consistía en buscar otra chica, no era tarea fácil, pues había verdaderas bellezas, la verdad es que no tuve mucho tiempo para pensármelo, sin más una de las chicas, se cruzó en mi camino y me propuso el servicio, yo que ya estaba hartito de caminar calle arriba calle abajo, no me lo pensé mucho más, era mulata, no muy alta pero tampoco muy baja, llevaba unos tacones muy altos, sue pelo negro melena rizada, buen tipo, guapa de cara, dulce en el trato, me preguntó qué buscaba, yo no atreví la a decirle que un “travesti”, sin más me dijo, mira subimos allí arriba, una especie de montículo,oscuro pero a la par que resguardado, nos tocamos y si ves que no te gusta lo que ves pues no pasa nada, vale, yo acepté si bien sabía claramente lo que esperaba encontrarme, ella creo que pensó por algún momento que tal vez podía ser uno de esos clientes despitados que tal vez buscaba otra cosa.
Una vez allí arriba, ella desplegó una especie de pañuelo gigante en el suelo, antes de pedirme que me sentase me tocó el pecho, mi culo, mientras me iba diciendo lo duro que estaba todo, yo le acaricié su culo, me encantaba, olía muy bien esto lo recuerdo muy bien, nos dimos un beso en la boca, su voz me enamoraba, me volvía loco cada vez que me décía algo, me dio instrucciones de sentarme en el suelo, yo me senté, jo mezcla de sentimientos, nervios, excitación etc, me bajó el pantalón, luego los slips, sacó un preservativo de su bolso me lo colocó, yo estaba a tope a pesar de las cervezas y sin más se la metió en su boca hasta arriba, era la primera vez que me la “chupaba” un travesti, yo le tocaba su culo mientras hacía felación, que bien olía, le acariciaba, estuvo un buen rato, mamándomela, pero veía que así, había para rato hasta que me corriese, es que curiosamente me entra un cosquilleo, y casi nunca logro correrme con felaciones, entonces optó por hacerme una paja, mientras yo iba tocando su culo cada vez más cerca de su paquete y si allí estaba su polla, bien guardada, que sensación , era la primera vez que tacaba una polla que no fuese la mía, despejó todas las dudas sobre mi posible confusión, nos tocamos mutuamente, ella me siguió masturbando hasta que me corrí, fue algo delicioso y de un recuerdo imborrable, me limpió, le pagué lo ajustado y me dio su número de telf para poder quedar en otra ocasión en su casa y así estar más cómodos; todavía lo tengo, y en serio que muchos días me dan ganas de llamarla pero hoy estamos lejos.
Sin duda Barcelona es maravillosa, y es cierto que posee un encanta especial. La Sagrada Familia, Casa Batllo, Pedrera etc quedarán para otra vez.
Espero os haya gustado mi relato y me alegraría que haya valido para entreteneros un rato.
Added on January 17, 2017 at 12:00 am